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El dolor agudo es una respuesta fisiológica de advertencia de distintos seres vivos, para poder proteger zonas lesionadas y disminuir su función, para reparar lo más tempranamente posible. Es por eso que si un animal se lastima una pata, cojea. Pero cuando el dolor se cronifica, hablamos de una enfermedad per sé, la cual afecta a millones de personas alrededor del mundo.
Por otro lado, distintos reportes han mostrado que las hormonas jugarían un rol en la modulación del dolor tanto en hombres, mujeres cis o trans.
Los anticonceptivos orales, comúnmente conocidos como pastillas anticonceptivas, pueden tener una variedad de efectos en el cuerpo de las mujeres, y esto incluye posiblemente influir en ciertos tipos de dolor, como se ve a continuación:
Dolor menstrual: Las pastillas anticonceptivas son a menudo recetadas para manejar el dolor menstrual, conocido como dismenorrea. Estos medicamentos pueden reducir la severidad del dolor al disminuir la producción de prostaglandinas, sustancias que están implicadas en el dolor y la inflamación.
Endometriosis: En casos de endometriosis, una condición donde el tejido que normalmente reviste el útero crece fuera de él, los anticonceptivos orales pueden ser usados para aliviar el dolor. Esto se debe a que pueden ayudar a regular los ciclos menstruales y reducir la cantidad de tejido endometrial.
Dolores de cabeza y migrañas: Para algunas mujeres, el uso de anticonceptivos orales puede desencadenar dolores de cabeza o migrañas. Sin embargo, en otros casos, pueden ayudar a reducir la frecuencia de estos dolores. Es importante que las mujeres con antecedentes de migrañas severas consulten con su médico antes de usar estos medicamentos.
Dolor en los senos: Algunas mujeres pueden experimentar sensibilidad o dolor en los senos como un efecto secundario de los anticonceptivos orales. Esto generalmente se debe a los cambios hormonales que estas pastillas provocan.
Efectos secundarios y sensibilidad individual: Cada persona puede reaccionar de manera diferente a los anticonceptivos orales. Algunas mujeres pueden experimentar efectos secundarios mínimos, mientras que otras pueden tener respuestas más significativas, incluyendo cambios en su percepción del dolor.
Interesantemente, un estudio realizado en la Universidad Viña del Mar con estudiantes de último año de la carrera de Odontología, y liderados por quien escribe reportaron que la utilización de anticonceptivos orales de forma crónica, era capaz de disminuir el tiempo de control endógeno del dolor en comparación al grupo control, lo que podría significar que muchos de los fenómenos que se experimentan durante la terapia hormonal, en cuanto al control propio de acciones dolorosas tanto en clínica como en el diario vivir, pueden verse influidos debido a estas condiciones hormonales, acortando el tiempo de “auto analgesia” por la terapia anticonceptiva.
También el grado de stress auto-reportado durante la experimentación variaba según el estado del ciclo hormonal en el cual se encontraban las mujeres voluntarias del estudio, sintiéndose más o menos estresadas en una misma acción clínica potencialmente dolorosa, según el día de su ciclo menstrual.
Estos resultados podrían servir para generar pautas clínicas durante la atención odontológica, determinadas en la historia clínica y ejecutadas en las indicaciones post tratamiento, en especial durante cirugías, endodoncias y trastornos témporo mandibulares. Este tema de investigación se enmarca en una de las líneas prioritarias de investigación que tiene la carrera de Odontología y la UVM.
Por: Dr. Nicolás Pinto Pardo, cirujano dentista, especialista en Rehabilitación Oral y académico UVM.
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