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La Ley de Inclusión Laboral (Nº 21.015), representa, indudablemente, un avance para el país en materia de equidad de oportunidades y no discriminación de personas en situación de discapacidad. Entre las innovaciones está eliminar la discriminación salarial y todo tipo de discriminación, contando con garantías en los procesos de selección laboral. Sin embargo, su operacionalización no ha estado exenta de problemas y contradicciones.
A nivel regional, ¿Cómo visualiza la implementación de esta ley?
Desde que entró en vigencia esta ley en abril de 2018, se visualizan una serie de desafíos en su implementación, tanto a nivel nacional como regional. Recordemos que esta ley se aplica para organismos públicos y privados con más de 100 trabajadores, los cuales deberán contratar al menos al 1% de personas en situación de discapacidad.
¿Cuáles son los principales desafíos que presenta esta ley a las empresas?
En efecto, la inclusión laboral no es meramente un proceso administrativo-legal. Se requiere abordar este desafío desde su complejidad y multidimensionalidad, abarcando un cambio cultural que es necesario a nivel de personas y organizaciones. En este corto andar, lo que ha sido posible de observar es una instrumentalización de la ley bajo un enfoque utilitarista. Las empresas e instituciones han tendido a incluir en sus procesos de reclutamiento y selección de personal a las personas en situación de discapacidad, muchas veces, solo para cumplir con la cuota predefinida legalmente. No se buscan las competencias y atributos de las personas (sus capacidades diferentes que pueden representar un aporte a la organización), sino que la búsqueda e inclusión laboral de estas personas se reduce a su condición de discapacidad. Esto podría traer importantes vicios que forman parte del real entendimiento de estos procesos.
No solo a nivel de inclusión laboral, ¿somos un país inclusivo? ¿qué nos falta para serlo?
Para convertirnos en un país inclusivo, tenemos varios desafíos por delante que no solo se reducen al mejoramiento de las condiciones de accesibilidad (cuestión que sin duda es relevante). También nos encontramos ante un importante desafío en la participación vinculante y autodeterminación de las personas en situación de discapacidad, para que sean parte de la construcción de este cambio sociocultural y de su propio destino.